Published in Peru - Political debates and analysis - 14 Apr 2020 21:22 - 3
Hubo un tiempo que nuestra nación significó algo y tal vez fue respetada o temida. Ahora ya no se que es, un mero recuerdo un poco de ceniza resistendose a ser llevada por el viento. Culpables sobran y tienen nombre propio pero eso ya no importa. Al final todos somos respónsables. Era de esperar, es un ciclo continuo que se repite en todos los multiversos. El borrado siempre será nuestro destino. No diré nada acerca de nuestro borrado, de los pactos infames, de los politicos rasteros, de la diplomacia fallida de los traidores, etc. Me llevaré todos los secretos a la tumba.
Nunca me ha gustado la musica latinoamericana, tampoco la andina o similares. Sin embargo ha estas alturas he llegado ha apreciar ciertas piezas. Será tal vez que la genetica y la sangre nunca se pierden del todo. No lo se. Dejo un video que espero lo vean. Como todo, tambien tiene su historia.
Espero que esta historia se vuelva un metarrelato y encuentren la aproximación oculta detras de ello.
Corria la segunda mitad del 2017 y en todos los tabloides corria una noticia. El último icono varón de la musica folclorica, sucesor de Picaflor de los andes, estaba gravemente enfermo. Un cáncer a la médula osea e insuficiencia renal, además de un raro vitiligo, afectaban fravemente su salud llevandolo a estar postrado en una cama de hospital. Viendo que tal vez no podria sobrevivir los proximos meses se realizó un apresurado homenaje en vida en el teatro nacional. El chato grados se preparó para dar su ultimo concierto. En silla de ruedas y muy debil saco fuerzas de flaqueza, con coraje temerarimente brillo esa noche como en sus mejores tiempos.
La siguiente canción inapropiada para el ambiente del homenaje pero adecuada para este momento en particular en mi periodico. Las letras y la situación se interralacionan de manera perfecta para marcar un final. Mi final en este juego.
Fue mi inteción colaborar para que nuestro imperio crezca y domine a nuestrios enemigos pero no se pudieron concretar. Las cirancias no lo permitieron o tal vez fue el destino, no podemos escapar a ello. Mi testamento es el siguiente: Mi oro se destinará a pagar mis deudas, mi cuenta (pobre pero honrada) será encargada a quien me garantice que lo dará un buen uso. Con el unica restricción que no le cambie el nombre ni el perfil. En el peor de los casos morirá en el abandono. Adios.
Eso es todo me voy sin pena ni gloria. Gracias por todo.
No es un adios es un hasta luego. Lo muerto no puede volver morir.
Viva el Sacro Imperio Peruano.
Nunca me ha gustado la musica latinoamericana, tampoco la andina o similares. Sin embargo ha estas alturas he llegado ha apreciar ciertas piezas. Será tal vez que la genetica y la sangre nunca se pierden del todo. No lo se. Dejo un video que espero lo vean. Como todo, tambien tiene su historia.
Espero que esta historia se vuelva un metarrelato y encuentren la aproximación oculta detras de ello.
Corria la segunda mitad del 2017 y en todos los tabloides corria una noticia. El último icono varón de la musica folclorica, sucesor de Picaflor de los andes, estaba gravemente enfermo. Un cáncer a la médula osea e insuficiencia renal, además de un raro vitiligo, afectaban fravemente su salud llevandolo a estar postrado en una cama de hospital. Viendo que tal vez no podria sobrevivir los proximos meses se realizó un apresurado homenaje en vida en el teatro nacional. El chato grados se preparó para dar su ultimo concierto. En silla de ruedas y muy debil saco fuerzas de flaqueza, con coraje temerarimente brillo esa noche como en sus mejores tiempos.
La siguiente canción inapropiada para el ambiente del homenaje pero adecuada para este momento en particular en mi periodico. Las letras y la situación se interralacionan de manera perfecta para marcar un final. Mi final en este juego.
Fue mi inteción colaborar para que nuestro imperio crezca y domine a nuestrios enemigos pero no se pudieron concretar. Las cirancias no lo permitieron o tal vez fue el destino, no podemos escapar a ello. Mi testamento es el siguiente: Mi oro se destinará a pagar mis deudas, mi cuenta (pobre pero honrada) será encargada a quien me garantice que lo dará un buen uso. Con el unica restricción que no le cambie el nombre ni el perfil. En el peor de los casos morirá en el abandono. Adios.
Eso es todo me voy sin pena ni gloria. Gracias por todo.
No es un adios es un hasta luego. Lo muerto no puede volver morir.
Viva el Sacro Imperio Peruano.
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victormoma99Baninymiha98Comments (3)
No Hermes , los imperios caen y se levantan veras el resurgir de este pueblo como el Fénix, somos más y seremos aun mas, porque cusndo todos nos dan la espalda solo nosotros nos apoyamos, peruano levantate y vuelve a caminar otra vez
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Aunque mejor no te vayas podremos levantarnos otra vez y se necesitará de todos
seguimos y ya..